Se trata de la "tarea" que el Defensor había encomendado a la Corrala Utopía para hacer avanzar la negociación
Ahora queda que el Ayuntamiento de Sevilla e Ibercaja cumplan con las "tareas" que les fueron encomendadas
Esta mañana varios vecinos de la Corrala Utopía se han personado en las oficinas del Defensor del Pueblo Andaluz para hacer entrega de los informes sociales de las más de 30 familias que residen el inmueble. Para mediados de abril está prevista la
celebración de una nueva mesa de negociación entre Corrala Utopía,
Ibercaja, Ayuntamiento y Junta de Andalucía, en la que José Chamizo ejerce
como Defensor del Pueblo Andaluz de mediador. En la anterior cita,
celebrada en marzo, el Defensor encomendó a las distintas partes varias
"tareas" a realizar para hacer avanzar el proceso de negociación. A la Corrala Utopía se requirió que presentara informes sociales del conjunto de familias que residen
en el edificio. Esta tarea ya ha sido realizada y queda por esperar que
el Ayuntamiento de Sevilla e Ibercaja cumplan con su parte. El
Ayuntamiento debe conceder definitivamente la licencia de primera
ocupación al inmueble, para hacer posible que este tenga suministros de
luz y agua, e Ibercaja se comprometió a dar los pasos necesarios para
que los vecinos y vecinas puedan disfrutar de estos suministros.
Los informes sociales hoy presentados en el Defensor, y que también se harán llegar en la mañana de hoy al Ayuntamiento de Sevilla, reflejan al detalle la situación de las más de 30 familias que residen en la Corrala Utopía. De cada una de ellas se presenta una pequeña biografía que explica sus circunstancias familiares y personales, y se las acompaña de una detallada documentación que demuestra que todo lo que se afirma se corresponde con la realidad. En la Corrala Utopía viven familias con muy distintos perfiles y circunstancias, aunque todas ellas coinciden en un mismo aspecto: la necesidad urgente de una vivienda digna.
El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, está realizando una complicada labor de mediación para buscar soluciones a una situación en la que las distintas partes mantienen posturas todavía muy distanciadas. Por ello, desde la Corrala Utopía queremos facilitar esta labor con la intención de que pueda conducir a buen puerto. Sin embargo, creemos que las restantes partes implicadas pueden y deben poner mucho más de su parte. Ibercaja debe entender que la sociedad está harta de la especulación, la usura y los desmanes que han caracterizado la práctica de todas las entidades bancarias, y que debe por tanto dar pasos en una dirección opuesta. El Ayuntamiento de Sevilla creemos que debe abandonar la retórica de oposición a las corralas y reconocer que hay un problema serio con la vivienda para miles de familias en Sevilla. Y la Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta debe ir más allá de las buenas palabras y del discurso de apoyo a los movimientos sociales para realizar de manera urgente una política de vivienda que pueda solucionar las necesidades de miles y miles de familias andaluzas que están sufriendo una auténtica emergencia habitacional.
Los informes sociales hoy presentados en el Defensor, y que también se harán llegar en la mañana de hoy al Ayuntamiento de Sevilla, reflejan al detalle la situación de las más de 30 familias que residen en la Corrala Utopía. De cada una de ellas se presenta una pequeña biografía que explica sus circunstancias familiares y personales, y se las acompaña de una detallada documentación que demuestra que todo lo que se afirma se corresponde con la realidad. En la Corrala Utopía viven familias con muy distintos perfiles y circunstancias, aunque todas ellas coinciden en un mismo aspecto: la necesidad urgente de una vivienda digna.
El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, está realizando una complicada labor de mediación para buscar soluciones a una situación en la que las distintas partes mantienen posturas todavía muy distanciadas. Por ello, desde la Corrala Utopía queremos facilitar esta labor con la intención de que pueda conducir a buen puerto. Sin embargo, creemos que las restantes partes implicadas pueden y deben poner mucho más de su parte. Ibercaja debe entender que la sociedad está harta de la especulación, la usura y los desmanes que han caracterizado la práctica de todas las entidades bancarias, y que debe por tanto dar pasos en una dirección opuesta. El Ayuntamiento de Sevilla creemos que debe abandonar la retórica de oposición a las corralas y reconocer que hay un problema serio con la vivienda para miles de familias en Sevilla. Y la Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta debe ir más allá de las buenas palabras y del discurso de apoyo a los movimientos sociales para realizar de manera urgente una política de vivienda que pueda solucionar las necesidades de miles y miles de familias andaluzas que están sufriendo una auténtica emergencia habitacional.
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